- Desde la Antigüedad y en todas las Culturas el Drago es un Árbol Energético y Protector. El Drago tiene un Espíritu Fuerte, Simbólico y Sanador como el de los Dragones, no dudes en plantar un Árbol de Drago en tu jardín, te aportará muchísimos Beneficios Físicos y Espirituales.
ÁRBOL DEL DRAGO, LA FUERZA DE LOS DRAGONES
DRAGO ÁRBOL CURATIVO:
- La Resina del Drago tiene el Color de la Sangre y se le atribuyen muchas Propiedades curativas. Su Savia se extrae con fines medicinales, es un eficaz cicatrizante, tiene acción antiviral y antibacteriana, reduce las úlceras gástricas, estimula el sistema inmunitario y tiene propiedades antiinflamatorias.
RESINA DEL DRAGO
LEYENDA DEL DRAGO MILENARIO DE ICOD DE LOS VINOS
- Una tarde del pasado, cierto navegante mercader llegaba a las costas atlánticas en busca de Sangre de Drago... producto de gran importancia en la elavoración de ciertas preparaciones, y desembarcó en la playa de San Marcos, Icod de los Vinos, para llevar a efecto su propósito.
Estando ya en la playa, sorprendió allí a unas Damas de esta tierra, que se bañaban solas en el mar aquella tarde veraniega.
El intruso navegante las persiguió, logrando apoderarse de una de ellas. Esta trató astutamente de conquistar el corazón del extraño viajero para mejor buscarlo y lograr huir, y mostrándole signos de consideración y amistad le ofreció algunos hermosos frutos de la tierra.
Para aquel navegante que venía detrás de la Sangre del Drago, y traía metido en la imaginación y en el Alma el mito helénico de las Hespérides, los frutos que aquella Dama de esta tierra le ofreciera, pudieron muy bien parecerle las manzanas del mítico jardín. Mientras el comía gustosamente desprevenido, la bella aborigen saltó ágil al otro lado del barranco, y a todo correr huía hacia el bosquecillo cercano escondiéndose tras la arboleda.
El viajero, sorprendido al principio, trató de perseguirla de cerca, pero vio por sorpresa que algo se interponía en su camino, que un árbol extraño movía sus hojas como dagas infinitas, y que el tronco parecido al cuerpo de una serpiente se agitaba con el viento marino y entre sus tentáculos se ocultaba la bella Doncella Guanche.
El navegante lanzó el dardo que llevaba en sus manos, contra lo que el se le figuró un monstruo, con gran miedo y asombro, y al quedarse clavado en el tronco, el extremo de la jabalina empezó a gotear Sangre líquida del Drago.
Confuso y aterrorizado, el hombre huyó laderas abajo, se metió en su pequeña barca y se alejó de la costa, porque iva pensando en su corazón, que había sorprendido en el jardín a una de las Hespérides, a la que salió a defender el mítico Dragón.
